El Mundo Infinito

Bueno, al final me he decidido a subir mi historia, a ver si así sigo escribiendo más a menudo xD


Capítulo 1 - Nuevo hogar, nueva vida

Era de noche, caminaba tranquilamente sin saber donde ir. La calle estaba llena de edificios enormes, palacios, monumentos e incluso catedrales góticas, todo era bellísimo. De repente oí gritos, la gente corría desesperadamente intentando huír, pero yo me quedé paralizada por el miedo.
Las casas de mi alrededor se prendieron fuego y la gente se quedaba atrapada por sus llamas. Yo estaba desconcertada. Tenía miedo, quería huir, escapar de ese infierno.
Noté como varias personas se acercaban por detrás mía y aminoraban el paso. Empecé a correr. Me sentía en peligro.
Cada vez se acercaban más y más, y el número de personas aumentaba con el paso del tiempo. Era eterno, no sabía dónde esconderme, ¿qué iba a hacer yo en semejante situación?.
Después de una larga carrera terminé perdiéndolos de vista. Me paré para coger aliento, miré a mi alrededor y contemplé de pasada mi rostro reflejado en un cristal, pero el reflejo me engañó.
Mi apariencia era la de una joven con el pelo color chocolate, con extensiones plateadas. Los grandes ojos eran violetas, y llevaba un vestido realmente elegante, todo lo contrario a lo que yo solía vestir. Esa no era yo, sin embargo me recordaba a alguien que yo conocía, pero no sabía quién. Por el cristal pude ver una sombra que se acercaba a mí por detrás, pero por alguna razón su rostro no se reflejaba en el cristal.
Torcí lentamente la cabeza y algo me tapó la boca con la mano fuertemente. Quería gritar, patalear y hasta pegarle, pero me tenía inmovilizada y casi sin aliento. Aquella extraña sombra me alejó de la ciudad llameante hacia un bosque muy lentamente, cargando conmigo a rastras. Las luces se alejaban a través de las sombras del bosque e iba perdiendo el conocimiento poco a poco por cada paso que dabamos mi acompañante y yo...

- Crista, cariño, es hora de despertarse. Te he hecho tostadas, las tienes encima de la mesa de la cocina. ¿Crista? ¿Estas despierta?
De repente tocaron a la puerta y abrí los ojos. Solo había sido un sueño, aunque no lo parecía. Era tan real...

- Cinco minutitos más... -supliqué a mi madre escondiendo mi cabeza debajo de la almohada.
-De eso nada, jovencita. Como no bajes a desayunar dentro de diez minutos, te voy a sacar de la cama a mi manera.
-Yavoy... ya voy -le contesté saliendo de la cama. Bostecé y me estiré todo lo que pude para desperezarme.

Fui hacia el baño y me miré al espejo sólo para comprobar que mi aspecto no había cambiado respecto al día anterior, que yo seguía siendo la misma y no aquella chica de mi sueño. Algo me sobresaltó. Había una ligera marca en la boca, justamente en el mismo lugar dode el hombre de mi sueño me la había tapado para que no gritase.
...

espero que os guste n_n (que repetitiva que soy, no? xD siempre digo lo mismo jajaja)

PD: he cambiado algunas cosillas, creo que ahora queda mejor ^^

Uhh! está muy bien^^ En algunas cosillas te has colado, se te habrá pasado ponerlas xD Me gusta

en que? es para cambiarlo jejeje

Vale:

Spoiler:

¿No te refirás a moño o algo así? xD

Spoiler:

Quedaría mejor "quedaron". Por lo demás bien^^

En el primer caso, es algo parecido, pero no es un moño entero, es que no sabía como explicarlo xD es como un moño con pelos sueltos, pero en el que no está recogido todo el pelo, nose si me he explicado :S

y en el segundo caso, tienes razón, ahora mismo lo cambio

Muchisimas gracias por darme cuenta, y si tenéis alguna duda porque no me haya explicado, o que quedaría mejor de otra forma, me lo decís, vale? y eso va por tod@s jeje n_n

Mmmm, yo no sabía lo que era...jajaja Pues nada, entonces está bien xDD

aquí viene la continuación

Volví a mi dormitorio y me quité el pijama, para vestirme con unos vaqueros y una sudadera.
Aún con las zapatillas de andar por casa bajé las escaleras para ir a desayunar. Mi madre estaba en la cocina. Le di un beso y me senté en mi silla habitual, donde enfrente tenía dos tostadas crujientes que mi madre me había preparado, mantequilla, mermelada de fresa y un cuchillo para untar. Comencé a desayunar.

- ¿Dónde está papá? ¿Se ha ido ya al trabajo?
- Sí, hija, me dijo anoche que tenía una reunión muy importante con una gran empresa española. Le han dicho que alo mejor le contratan cuando absorban a la empresa de tu padre.
- Umh. Espero que le vaya bien en la reunión.

Cuando terminé de desayunar fui a lavarme la cara y cepillarme los dientes, después me puse mis botas y me eché la mochila al hombro para ir a clase.
Como siempre, las clases fueron como aburridas y muy cansadas, tanto que estuve a punto de dormirme en lengua, pero a final lo único que hice fue distraerme pensando en la pesadilla de esa noche.
Llevaba cinco días teniendo el mismo sueño, pero siempre era algo distinto. Esta noche era distinto el hecho de que un hombre fuerte me tapaba la boca, pero, sinceramente, no recordaba nada del aspecto de aquella persona, solo que era fuerte u que me hacía dañlo al taparme la boca con su mano.
Estos sueños, tan similares entre sí, eran muy realistas, demasiado diría yo. Además, siempre había dicho la gente que en los sueños no te pueden hacer daño, que todo es producto de la mente... pero yo sabía que eso no era verdad, ya que la marca de mi boca era una prueba de que sí pueden hacer daño.
Sonó la sirena del recreo y vi como todos mis compañeros salían a toda velocidad al patio. Yo tardé un poco en recoger e hice que mi mejor amiga, Amelia, yuviera que esperarme. Fuimos al patio y buscamos a nuestro grupo de amigas.
Estaban sentadas en las escaleras de la cafetería. Corrimos hacia ellas y nos pusimos al tanto de la conversación. Al parecer Ema había discutido con su hermano pequeño porque éste le había roto su ordenador, y todavía estaba que echaba humo.
Amelia se sentó a mi lado y, para cambiar de tema, Ema llevaba mucho tiempo hablando de ello, y cansaba bastante; empezó a hablarme.

...

ya sabeis, si hay algo que no entendais, me lo decís ^^

PD: aquí tambien he cambiado cosillas jeje

Algunos fallos^^

Spoiler:

´"Había"

Spoiler:

Pondría:

"Siempre dicen que en los sueños no te pueden hacer daño. Pero la marca que me dejó en la boca, era una prueba de que sí podían."

Por lo demás bien^^ Cuando puedas ya sabes, sube más xD

si, es que de vez en cuando se me escapan fallos tontos jeje como me vea mi profe de lengua me mata jajajajaja

la verdad es que no sabía como expresarme con esa frase, muchas gracias por tu ayuda ^^

mecaxis pues yo no le veo fallos xD, stare ciego ? xD

jajaja eso es porque los fallos ya los he corregido xDD

De nada mujer, para eso estamos xDD Volvemos a Zoro loco ajja

Jenny esos fallitos tontos!! jejeje aunque yo tampoco me habia dado cuenta jejeje

Oyee!! Me gusta!! Está bieen!!!

Una cosa en la primera parte que has puesto:

Spoiler:

Ahí pondría: Fui hacia el espejo del baño y me miré en él,o simplemente me miré, porque es muy repetitivo la misma palabra en una frase xD

Por lo demás, me gusta muchooo!!

Posdata: Cualquiera puede cometer fallos. xDD



Sube más!!

si, pero como soy tan tonta de que lo cambie en mi documento de word despues de subirlo... jajajaja se me pira la pinza xDD

para no hacer doble post modifico este para subir mas parte de mi historia, ok?

...

- Crista, últimamente estás muy callada, como si estuvieses continuamente en las nubes...
- ¿Tú crees? –Amelia asintió con la cabeza- Es que estoy pensando en el sueño de esta noche.
- ¿Sigue siendo el mismo sueño?
- Sí, pero termina distinto. Un hombre me tapó la boca por detrás y me llevó al bosque. Además, esta vez, cuando me miré en el espejo , no era yo -Amelia esperaba con curiosidad mi relato- Me refiero a que esa persona que estaba reflejada en el espejo me resultaba familiar, de hecho se parecía a mí, pero no era yo. Y tenía extensiones plateadas.
- Mmm... quizás quieras teñirte el pelo y por eso lo has soñado. A mí me ha pasado alguna vez.
- Pues la verdad es que había pensado en teñirme el pelo de negro, para ver como me queda, pero no hacerme extensiones plateadas.
- Ya te dije que seguro que te queda bien, pero a mí me gusta el castaño natural de tu pelo.
- Es que estoy harta de siempre ser castaña. Volviendo al tema, me sigue extrañando aquel hombre del sueño.
- Crista, no deberías de preocuparte tanto un simple sueño. Además, tú siempre has tenido mucha imaginación, hasta en los sueños.
- Pero Amelia, ¡es tan real que me va a volver loca al final!
- Seguro que en algún aspecto te sientes identificada con la chica del espejo, pero tú sabes que no eres así.
- Puede que tengas razón.

No le conté lo de la marca de la boca para no preocuparla, no era necesario. Seguro que eran imaginaciones mías. Todavía estaba medio adormilada cuando lo ví, así que no estaba al cien por ciento segura de lo que había visto.
Al volver a casa me extrañó que el coche de mi padre estuviera aparcado enfrente de la casa, y no en el garaje. Debía de tener mucha prisa. Entré en casa, dejé la mochila en las escaleras y fui a comer a toda prisa, tenía muchísima hambre y no sabía si iba a poder aguantar otro minuto más sin nada en el estómago, rugiéndome la tripa de aquella manera. Todo por no haberme dado tiempo a comerme mi almuerzo y haber estado todo el recreo hablando con mi amiga.

...

PD: se nota que he tenido un ataque de inspiración para cambiar cosas a que si? xDD

joe lo e leido y no encuentro errores =/

...

- Hola mamá. Hola papá. ¿Qué tal la reunión de esta mañana?
- Pues la verdad es que no me ha ido mal. –contestó mi padre entre cucharada y cucharada de sopa- “Van Reclame” está recortando personal y “Tecnopublicidad s.a” me a ofrecido un trabajo como director de marketing, y pagan bastante bien. ¿Te lo puedes creer? ¡director de marketing!
- ¡Eso es estupendo, Jasón! y, ¿cuándo empiezas a trabajar allí?- preguntó mi madre.
- Pues... quería hablar antes con vosotras.- esperamos en silencio hasta que, con un suspiro, lo soltó- “Tecnopublicidad s.a.” está en España, así que nos tendríamos que mudar a Madrid. Hay dos opciones: mudarnos, o poder estar juntos una vez cada dos o tres meses; y yo prefiero poder veros a las dos todos los días.

Se me cayó la cuchara de la mano al plato de sopa y me salpicó de sopa la camiseta, rompiendo ese incómodo silencio que se había formado en la sala.

- ¿Qué os parece la idea? ¿Nos vamos a Madrid?
- ¡NO!–grité malhumorada.
- Hija, no te pongas así. Tu padre lo hace para que vivamos mejor, es para nuestro bien.
- Me da igual. Yo no pienso irme de Holanda. –cogí mi plato y lo llevé al fregadero de mala gana- Me gusta Delft, y no lo cambiaría por nada del mundo, aunque me ofrecieran todo el dinero del mundo.
- Crista, no seas egoísta. Tu padre hace por nosotras. ¿Qué te crees, que está deseando ir a Madrid? No lo hace por él.
- ¿Egoísta yo? ¿Por qué, por querer quedarme donde siempre he vivido? ¡Vivir en Madrid es sólo un capricho! Mamá, entiéndeme a mí también: tengo aquí a mis amigos de toda la vida, y mudarme supondría empezar desde cero todo. Tendría que aprender a hablar castellano perfectamente, y precisamente, no soy muy extrovertida con la gente que no conozco, y lo sabes.
- He dicho que nos vamos a Madrid si me ofrecen el trabajo, y nos vamos. No me pongas excusitas ahora.
Subí a mi habitación cabreada, cogiendo mi mochila de camino. La arrojé con furia sobre el escritorio y me tumbé en mi cama para calmarme. No entendía porqué querían marcharse a un lugar del cual no sabíamos nada, sólo que hay toros y que bailan flamenco, nada más. Vale, a mi padre le iban a despedir, pero hay muchos trabajos con los que podríamos comer y vivir. No hacía falta irnos tan lejos.
Me incorporé y empecé a buscar información sobre aquella empresa que mi padre nombró, la española, para ver si había encontraba algo que pudiera convencer a mis padres de no mudarnos. Busqué y busqué en Internet y no localizaba la página principal de la empresa, pero saqué información de otra. Era una página de un periódico semanal, en el que hablaba de una empresa llamada “Tecnopublicidad s.a.” que estaba absorbiendo otras empresas menores para conseguir hacerse con el monopolio de la publicidad en Europa.
Definitivamente cuando se me ocurrió una idea: si encontraba en Internet, o donde fuese, algún carácter que no fuese de agrado para mis padres sobre la empresa española, podría convencerlos de que nos quedásemos a vivir en Delft.
Busqué en Internet la página principal de la empresa, pero no la encontré. Era muy extraño que una empresa no tuviese su página principal propia, como todas las empresas. Tuve que sacar información de un periódico semanal en el que hablaba de economía. Según un reportaje, "Tecnopublicidad s.a" estaba absorbiendo otras empresas menores para conseguir el monopolio de la publicidad en Europa.
Tras saber esto, definitivamente, no quería que mi padre trabajase en esa empresa, aunque sabía de sobra que mis padres no me iban a hacer caso, ni aunque les amenazara con irme de casa o hacer alguna locura. Así que me volví a tumbar en la cama con los brazos debajo de la cabeza, encendí la radio y cerré mis párpados, vagando por mi mente con la música de fondo hasta adormecerme en la oscuridad de los sueños.
...

PD: a ver si termino ya de corregir y vuelvo a subir u.u'

De nuevo no podía respirar. Abrí los ojos con angustia y vi las luces llameantes de la ciudad a lo lejos. El hombre me sujetaba fuertemente, pero por la constitución que había observado con su sombra, deduje que tendría poco más de dieciocho años.
De repente todo se calmó. Oía a lo lejos el fuego destruyendo todo a si paso. Percibí que la velocidad del joven disminuía, y ahora caminábamos, sin embargo no terminábamos de parar. Aflojó su mano de mi boca y me liberó de sus fuertes brazos.
Por fin pude respirar hondo para conseguir todo el oxígeno que antes no había podido conseguir. Me volví seriamente y me enfrenté cara a cara con él. Una larguísima capa le cubría todo el cuerpo, todo a excepción de los brazos.

-Mikel Barlow, ¿quieres hacer el favor de soltarme de una vez? –su nombre salió de mi boca involuntariamente- No hace falta que me agarres de esa forma, sé ir yo solita.

¿Cómo podía conocer el nombre de aquella persona? No lo conocía, y mucho menos sabía cómo se llamaba, pero lo que si es cierto es que salió de mi boca.
Oí una risa debajo de la negra capa de mi compañero, y en sus ojos ensombrecidos por ésta noté un ligero brillo de diversión por mi repentino enfado.

-Ah, ¿prefieres que te deje capturar por los succionadores? –me quedé sin habla- ¿Qué pasa, que no sabes quien ha preparado todo esto? Pero si quieres, dejo que te las apañes tú solita, eh.
-Pues claro que lo sé, ¿te crees que soy imbécil? Delante de mis narices han matado a...


Un portazo en la entrada que me sobresaltó y abrí los ojos como platos. Me levanté y eché una ojeada para ver quien había entrado de tan mal humor como para dar un portazo. Vi a mi madre apoyada contra la puerta respirando agitadamente. Bajé las escaleras despacio y mi madre me miró con desesperación, pero divisé escondida entre sus cabellos una lágrima que rebosaba por sus ojos. Bajó la mirada y corrió a la cocina.
Yo la seguí y la intenté preguntar que le pasaba, pero continuamente desviaba el tema de la conversación a cualquier otro tema que no tenía importancia, como si había recogido mi dormitorio, o que tal las notas, o simplemente no respondía y se hacía la sorda. Hizo amago de sonrisa para que no me preocupara, pero lo único que consiguió es preocuparme más aún.
Mi padre entró por la puerta se acercó para darle un beso. Le extrañó que no le devolviese el beso como siempre.

- Eli, ¿ocurre algo?
- No... –se lo pensó mejor- bueno, quiero que nos vallamos a otro lugar, y cuanto antes, si puede ser.
- Pero...¿porqué este interés en marcharos tan rápido?
- Es que... me ha sucedido algo... –mi padre tenía el ceño fruncido por la preocupación- cuando iba de compras... alguien me a perseguido... y al cruzarse conmigo... le oí -mi madre empezó a llorar levemente- amenazarme de muerte.
- ¿Quién ha sido? ¿Lo conocías de antes? ¿Le has visto la cara?
- No lo sé, no lo había visto nunca.
- Vamos a la policía ahora mismo a denunciarle- agarró a mi madre del brazo y abrió la puerta, mi madre la cerró enseguida y se apoyó en ella para no dejarle pasar.
- Por favor, no quiero que la gente se entere, eso sólo nos traería problemas. ¿Porqué no aceptas el empleo de la empresa de España?
- Cariño, eso no viene a cuento. Tenemos que denunciarle, yo no voy a dejar que te haga daño, ¿me has oído?
- Sí, pero por favor... –mi madre puso cara de pena para que mi padre accediera, siempre le funcionaba- vámonos a España.
- De acuerdo, ahora mismo llamo a las empresa española, y ya que están, podrían buscar una casa allí para alojarnos lo más rápido posible.
- Espera... ¿cuándo nos vamos a mudar? –intervine yo.
- Mañana mismo, si nos da tiempo, claro. Voy a hacer unas cuantas llamadas para preparar todos los papeles y mañana por la noche partimos hacia nuestro nuevo hogar.
- ¿Qué? No me podéis hacer esto... mamá, no hace falta que nos vayamos lejos, simplemente con ir a la policía estaría solucionado.
- No, Crista, no vamos a poner a tu madre en peligro por un capricho tuyo.
- ¿capricho mío? Pero si el capricho es vuestro, estáis muy emocionados con nuestro viaje, cosa que no entiendo porque vamos a dejar toda una vida en esta casa. Cada rincón, cada pared guarda un suceso diferente que nunca más volveremos a vivir.
- Crista, ya tenía los papeles casi preparados desde ayer. Me gustó la idea de ser director de marketing y no la voy a dejar escapar. Además, así aprenderás otro nuevo idioma, y harás más amigos. Hagas lo que hagas, no voy a cambiar de idea, así que haz el favor de ir empaquetando tus cosas para mañana.

Pongo un buen cacho para que no os aburráis jeje mientras que estoy de puente espero que os guste ^^

PD: bueno, ya he terminado de corregir, solo falta seguir poniendola jeje

PD2: todavia es un poco... aburrida la historia, pero tranquilas, que luego se pone MUY interesante xDD

jenny, por fin hemos lograo la escenita del demonio jajaja ya vereis algo que salgan malos, es mio ajjaja se e pira mucho la pinza.

Ale, ya he comentao estas contenta? mas te vale que si no...

continuación:

Con lágrimas en los ojos de la ira y la impotencia fui a mi dormitorio dando patadas a todo lo que se encontraba en mi camino. Busqué mi maleta, la puse encima de la cama y empecé a meter ropa, objetos importantes, regalos que sabía que iba a utilizar... de todo. Le faltó meter una prenda más para que la maleta explotase y se esparciera todo por la habitación entera.
Sabía que ese era mi último día en aquella maravillosa ciudad, que nunca más vería los canales de agua cristalina desde la ventana, ni los verdes jardines con sus fuentes y repletos de césped... pero lo que más me angustiaba era que no podía despedirme como es debido de mis amigas, mis compañeras de clase desde la infancia, y con las que había compartido tardes locas y divertidas. Ni siquiera había tenido oportunidad de prepararme para asumir este cambio en mi vida.
Llamé a mis amigas por teléfono individualmente para despedirme de ellas. No había llorado tanto hasta ese momento en toda mi vida. Amelia, que fue a la primera que llamé, se puso a llorar como una magdalena, y me contagió a mí al oír que lloraba de tal manera que casi parecía que no íbamos a volver a vernos y habláramos en lo que nos quedaba de vida.
A la mañana siguiente tocaron a la puerta de madrugada y fui a abrir, sabiendo que mis padres estaban ocupados. Bajé las escaleras restregándome los ojos del sueño y abrí la puerta. Mis amigas gritaron “¡SORPRESA!” y di un respingo del susto que me habían dado. Me abrazaron todas a la vez en un abrazo colectivo, y cuando me soltaron, me sorprendieron aún más de lo que estaba. Mery escondía una bolsa con varios paquetes envueltos con envoltorios distintos.

- ¿Qué es eso que llevas ahí? –pregunté señalando la bolsa.
- Tus regalos, ¿no pensarías que ibas a irte sin regalos de despedida, no?

Me ofrecieron uno de los regalos y desgarré el envoltorio. En su interior un neceser de rayas a colores alegres, era bastante grande.

- No se si te va a gustar, pero lo hemos elegido entre todas con cariño. Seguro que te será útil en tu nuevo hogar.
- Me encanta. Chicas, sabéis perfectamente que todo lo que me regaléis me va a gustar.
- Ya pero... –Amelia bajó la cabeza y Milou contestó por lo bajo.
- Algunas cosas no sabemos si te van a gustar, normalmente no les das ningún uso a ese tipo de objetos.
- No os preocupéis, ya veréis como sí que lo uso.

Me dieron un paquete que, por el tacto, parecía alguna prenda. Lo abrí con cuidado para no romper o deshilachar la prenda, pos si acaso, como no sabía de qué prenda se trataba. Me quedé boquiabierta al ver qué era. Era un vestido negro corto con una flor roja en uno de los tirantes No entendía porqué me regalaban un vestido, ellas sabían perfectamente que yo pocas veces me arreglaba mucho para salir, y no tenía intención de hacerlo en España.

- Es precioso. Gracias chicas, pero teníais razón, no creo que lo utilice.
- Pruébatelo, que quiero ver lo guapa que vas a estar con ello cuando te lo pongas -soltó Ema.
- Si, anda, que necesitamos saber si te queda bien o no -continuó Sophí.

Tuve que probármelo con zapatillas al no tener zapatos de vestir. La verdad es que no quedaba nada bien el vestido con las zapatillas de deporte. Volví al salón, donde esperaban mis amigas impacientes, y al verme se quedaron asombradas.

- Te queda perfecto, parece que te lo hayan hecho exactamente para ti, Crista. –Amelia se acercó a mí y me hizo dar una vuelta sobre mí misma para lucir más el vestido.
- Si, sobretodo con mis zapatillas -nos empezamos a reir ligeramente- Muchas gracias, chicas. En serio, pero seguramente se quede en el armario guardado.
- Te lo tienes que poner alguna vez, eh, que para algo te lo hemos regalado, que sabemos que no tienes ninguno –Sophí arqueó una ceja mientras que hablaba.
- Vale, pero como no me lo ponga para una boda o bautizo, lo voy a tener complicado –me rasqué la cabeza pensando en cuando me lo pondría. Ya se me ocurriría alguna ocasión.

El siguiente regalo fue una webcam para mi portátil, para que de vez en cuando me pudieran ver y hablar conmigo, aunque solo fuese por Internet. Me alegró mucho pensar que se habían acordado que yo no tenía ninguna webcam y querían que yo tuviera para que me viesen. También me regalaron un gatito de peluche blanco muy suave y un maletín de maquillaje que seguro que lo iba a usar poco.

- No hacía falta que me comprarais nada, seguro que os habéis gastado una fortuna.
- No, solo los ahorros de estos últimos años, pero es por una buena causa.
- Entonces no los puedo aceptar. Son vuestros ahorros y que yo me valla a ir de aquí no significa que tengáis que gastaros todo lo que tenéis por mí.
- Crista, lo hacemos porque queremos. Nadie nos ha obligado, y si no los aceptas nos vamos a enfadar mucho contigo.
- Vale, vale. Solo los aceptaré si no os enfadáis conmigo.
- Trato hecho. Toma. –Amelia me entregó otro paquete, en su envoltorio había una gran nota en la que ponía: “Te vamos a echar mucho de menos, Crista”- Este regalo le habíamos reservado para el final. Es el que menos dinero hemos gastado, pero...

Saqué lo que había en el interior del regalo y estallé en lágrimas. Era un álbum de fotos bastante grande, en el que se hallaban fotos de los mejores momentos que habíamos pasado juntas. Al verme llorar, Amelia comenzó también a llorar, y las demás intentaron contenerse las lágrimas, a pesar de que no pudieron resistirlo más y finalmente se unieron a nosotras. Amelia y yo éramos unas lloricas, todo el día llorando...

espero que os guste ^^